Ligeramente amargo y con un color verde pálido bebemos a sorbos este té tan conocido, que también destaca por sus características y propiedades beneficiosas para nuestra salud. Desde que en España también se ha ido extendiendo la moda del té de forma progresiva, el té verde está en boca de todos. En el ámbito internacional, Japón destaca por su admiración hacia este producto por sus cafeterías especializadas en té verde, donde no solo puedes beberlo, sino también aprender y descubrir más sobre su historia.
Para que tú también puedas convertirte en un experto del té verde, en esta entrada podrás encontrar informaciones varias sobre esta bebida tan especial. Podrás saber más sobre su historia, origen, características e incluso sobre su correcta forma de preparación. Además, también incluye recetas originales para que puedas experimentar el té verde de una forma diferente. Descubre también nuestra variedad de té verde de Semper Tea: green.
Historia del té verde – Empezó como remedio medicinal y acabó siendo una bebida para las élites de la sociedad
El té verde tiene una historia interesante y compleja. Al igual que los tradicionales té negro y té oolong, el té verde proviene de la planta del té camelia sinesis. Sin embargo, el té verde se diferencia por su oxidación nula. Fue la base para el resto de tipos de té que son oxidados durante el proceso de elaboración. Debido a esto, el té verde es considerado el más antiguo del mundo.
El momento exacto del descubrimiento del té verde es misterioso y desconocido, aunque se afirma que encuentra su origen en la región china de Shen Nong. La leyenda cuenta que, el emperador chino se encontraba en su jardín plantado por especies salvajes con un recipiente con agua caliente. Una ligera brisa agitó unas hojas maduras que cayeron en el recipiente. El emperador se sorprendió por el aroma que desprendía y pronto comenzó a popularizar la bebida.
Las diferentes dinastías ejercieron su influencia sobre el té verde, cada una cambiaba la forma de preparación del té y con ello su sabor, por ello, la antigua tradición del té verde no tiene nada que ver con el té verde que bebemos en la actualidad. Aunque esto demuestra que realmente se trata de una bebida con una larga tradición.
También cabe destacar que el consumo de té verde en la antigüedad se encontraba directamente relacionado con el estatus social de las personas. En la actualidad, el té verde se ha convertido en un indispensable que pueden beber de forma habitual personas de diferentes situaciones y contextos sociales, desde un estudiante universitario hasta personas de la realeza o con alto poder adquisitivo. Sin embargo, las dinastías chinas determinaron de forma diferente las clases que tendrían acceso al té verde. Destacan las dinastías Tang, Ming y Song.
La torta de té verde de la dinastía Tang
Durante el reinado de la dinastía Tang desde el 618 al 907 d.d.C. el té verde se popularizó por primera vez. Aunque no debemos olvidar que en aquella época se preparaba de una forma completamente distinta a como lo hacemos hoy.
Tras la cosecha, las hojas de té se cocían al vapor, después se aplastaban con un mortero y se presionaban hasta formar una especie de torta de té verde.
Para consumirlo posteriormente en forma de bebida, se cocía la torta de té verde en agua junto a otros ingredientes diferentes como arroz, cebolla, sal o jengibre. De esta forma, el té verde lo bebían sobre todo las personas pertenecientes a las clases altas de la sociedad china.
No obstante, el té verde no solo triunfó como bebida caliente en aquella época, sino que también tuvo mucho éxito por su función medicinal y curativa. Se reconocían sus efectos positivos y se llegaban a usar las hojas de té verde trituradas para colocarlas sobre partes doloridas del cuerpo.
El té verde como polvo de té durante la dinastía Song
A partir del reinado de la dinastía Song la cultura del té experimenta grandes cambios. Las hojas de té verde ya no se introducían en el agua caliente y ya no se preparaba la anteriormente mencionada torta de té. Cambió la técnica de preparación. A partir de esta época, las hojas de té se cortaban y rayaban de una forma tan minuciosa, que se formaba una especie de polvo verde. Este polvo de té se cocinaba en agua caliente y se disfrutaba con una consistencia espumosa.
Esta forma de preparación fue refinada y convertida en ritual a lo largo de los años, convirtiéndola en una ceremonia del té que pasó a convertirse en la rutina de la sociedad china. Se convirtió en una parte muy importante de su cultura y sus tradiciones. La cultura del té, además, fue extendida desde China a Japón y sigue siendo una interesante costumbre que resulta atractiva a los occidentales.
El té verde como infusión de hojas de té en la dinastía Ming
Al comenzar el dominio de los mongoles en el siglo 13, la cultura del té experimenta un pronunciado retroceso durante el reinado de la dinastía Ming. La refinada cultura del té de la dinastía Song no era compatible con los gustos de los mongoles respecto a esta bebida. A los mongoles les encantaba el té oxidado y con un sabor más intenso. De hecho, la preparación del té en polvo decayó y todavía a día de hoy desempeña un papel menos destacado e importante.
Durante esta época la cultura del té volvió remontarse a sus raíces y por ello, se volvió a utilizar la técnica de preparación de las hojas de té secas. Además, los métodos y procesos para secar y detener o poner en marcha la oxidación del té provienen de esta dinastía. También es en esta época cuando el té comenzó a expandirse hacia Europa. Como prueba de ello, a día de hoy podemos encontrar té verde en cualquier supermercado.
A pesar de su uso generalizado en todo el mundo, hay algo que no debemos olvidar: el té verde está íntimamente ligado a la historia china. El té constituye rica tradición que ha moldeado la vida cotidiana de innumerables personas a lo largo de los siglos. Esa es otra razón por la que vale la pena descubrir más sobre esta bebida tan interesante. A continuación pasaremos a enumerar y valorar las distintas propiedades del té verde.
Las propiedades del té verde – Un superalimento
Junto con las semillas de Chía, los aguacates y otros alimentos, el té verde cuenta como los llamados “superalimentos” o “superfood”, los cuales, en algunos casos, han sido objeto de críticas y puestos en duda. En el caso del té verde, las críticas giran sobre todo entorno a la contaminación a la que se encuentran expuestas las hojas de té, ya que podemos llegar a ingerir estos elementos nocivos al preparar el té en el agua.
Para poder solucionar este problema, es imprescindible que el producto sea ecológico y que se trate de un té verde de calidad no expuesto a sustancias químicas perjudiciales para la salud. Afortunadamente, ese es el caso del té verde de Semper Tea: green.
Este té cuenta con la certificación ecológica de la Unión Europea, lo cual significa que en la producción del mismo existe una prohibición estricta del uso de de pesticidas y fertilizantes químicos y sintéticos. Puedes disfrutar de los beneficios del té verde sin el malestar que pueden ocasionar estas sustancias químicas.
Los componentes del té verde: los antioxidantes que necesitas
En la producción de té verde no se lleva a cabo ningún proceso de oxidación de las hojas. Por ello, el té verde contiene poderosos antioxidantes llamados polifenoles. Estos combaten los radicales libres en el cuerpo, que modifican las células y que puede dañar el ADN e incluso provocar la muerte celular.
Por otra parte, las vitaminas C, E y la provitamina A también se encuentran en el té verde.
Además, el té verde contiene L-teanina, un compuesto de aminoácidos con efecto calmante, perfecto para conseguir cierta relajación en tus momentos de descanso. Por otro lado, los alcaloides, como la cafeína, tienen un efecto estimulante en el té verde, para mantenerte activo pero sin sentirse fatigado, ya que la cafeína del té actúa de una forma menos intensas que la de otras bebidas, como la del café.
Los beneficios más importantes del té verde
Aumenta la capacidad cerebral
El ingrediente clave en el té verde es la cafeína. Es conocido como un estimulante y produce un aumento de la actividad de ciertos neurotransmisores en el cerebro. Por esto, el té verde no solo se mantiene despierto, sino que también puede mejorar el tiempo de reacción, el estado de ánimo y la memoria. El aminoácido L-teanina tiene una función similar, de modo que ambas sustancias desarrollan efectos sinérgicos. Esto asegura una energía física y mental duradera y aumenta la productividad.
Desintoxica el cuerpo
Los antioxidantes, como el galato de epigalocatequina (EGCG) en el té verde, actúan como potentes recolectores de radicales. Los radicales son responsables de acelerar los procesos de envejecimiento, haciendo que la piel se arrugue e impure más rápido. Los antioxidantes del té verde desintoxican el cuerpo y eliminan el daño causado por los radicales libres. Así, las bacterias se eliminan mejor del cuerpo, lo que reduce el mal aliento, fortalece el esmalte y embellece el cutis.
Ayuda a perder peso
El té verde ayuda a acelerar el metabolismo del cuerpo y quemar grasa. Especialmente los polifenoles y la cafeína en el té verde se involucran en esta actividad para hacer más efectivas las dietas habitualmente usadas para perder peso. Por otra parte, una taza de té verde puede hacer que los antojos sean menos frecuentes, lo cual puede ser de gran ayuda.
Potencia el crecimiento muscular
El té verde puede aumentar la producción de la hormona de crecimiento humano (HGH). Esta hormona es necesaria para el crecimiento muscular y la construcción muscular.
Mejora el aspecto de la piel
El té verde tiene un efecto muy positivo y eficaz sobre la piel. Como los antioxidantes eliminan los radicales libres dañinos para la salud de las células de la piel, se puede retrasar considerablemente su envejecimiento. Los radicales libres son principalmente una causa de la radiación ultravioleta excesiva y provocan un desgaste prematuro. Al mismo tiempo, los polifenoles protegen la piel de las quemaduras solares y favorecen la renovación celular.
Las propiedades antiinflamatorias en el té verde ayudan a combatir las espinillas y el acné de manera sostenible. El té verde se puede beber o aplicar directamente sobre la piel como una máscara. Además, reduce la inflamación existente mientras protege contra nuevas impurezas.
Para que el té verde pueda desarrollar también sus cualidades positivas al completo, explicaremos qué se debe considerar en su preparación.
El pequeño arte del té: la perfecta preparación de una taza de té verde
La taza, una bolsita de té, agua hirviendo… ¿y ya está? Puede ser así de fácil.
Pero si quieres disfrutar del aroma del té verde en su totalidad y aprender los secretos y las técnicas de una correcta preparación, hay algunas cosas que debes tener en cuenta.
La dosificación y la calidad del agua juegan un papel importante
Es importante prestar atención a los detalles sobre la dosificación. Cada bolsita de té contiene aproximadamente 2 gramos de té. Esta cantidad de té ha sido adaptada y es considerada la cantidad perfecta para una taza de té. Por lo tanto, si quieres preparar una taza de té verde, una bolsita de green de la Coral Collection o una bolsita clásica de green de la Pearl Collection serán perfectas para ello.
Por otra parte, si prefieres preparar una tetera para dos o más personas, es conveniente saber la cantidad de agua proporcional a lo que usarías para una taza de té. Dependiendo de si se prefiere un sabor más intenso o más suave, se deberá añadir una bolsita más o menos, respectivamente.
Respecto al agua, es recomendable usar agua mineral sin gas, ya que no cambiará los aromas y el sabor del té verde, pudiendo además conservar todas sus propiedades y principios activos. Es preferible usar un agua de baja mineralización (agua blanda) y que no sea muy calcárea.
La temperatura del agua también es decisiva
Cada tipo de té requiere una temperatura concreta del agua. En el caso del té verde, el agua debe calentarse hasta un máximo de 85ºC. Si excede esta temperatura, puede ocurrir que se vean afectados el sabor y el olor del té.
Lo mejor es calentar el agua en una olla o hervidor de agua. La mejor manera de determinar la temperatura ideal del agua, por supuesto, es con un termómetro. Pero, ¿cómo podemos calcular la temperatura ideal de 85 °C si no tienes un termómetro a mano?
Existe una técnica basada en la observación de las burbujas que se forman en el agua cuando se calienta. ¡Solo necesitas saber un poco sobre la apariencia de los animales marinos!
Realmente, la mejor forma de comprobar la temperatura es comparar las burbujas del agua con el tamaño de ojos de las gambas y los peces:
- El tamaño de los ojos de una gamba: pequeñas burbujas del tamaño de un alfiler. La temperatura del agua se encuentra entre 68 °C y 78 °C.
- El tamaño de los ojos de un cangrejo: comienza a aparecer cierto humo. La temperatura está entre 79 °C y 81 °C.
- El tamaño de los ojos de un pez: el agua parece estar cerca del punto de ebullición y las burbujas se forman en el suelo. Ahora la temperatura del agua está entre 82 °C y 85 °C. ¡Perfecto para nuestro té verde!
- Las burbujas forman collares de perlas: las pequeñas burbujas se alinean en la superficie asemejándose a cadenas de perlas. La temperatura del agua ya es muy alta, está entre 90 °C y 96 °C.
- Torbellino furioso: el agua ya está hirviendo y ha alcanzado una temperatura de 100°C.
Como ya has podido comprobar, cuando las burbujas del agua caliente alcanzan el tamaño de un ojo de pez, ya podrás apagar la hornilla o el calentador de agua. Tendremos el agua con la temperatura perfecta para nuestro té verde.
Directamente depositamos el agua en la taza o en la tetera, en la que ya habremos depositado las bolsitas de té. El movimiento del agua sobre la bolsita de té libera directamente el aroma y el sabor del té verde.
Después, debemos dejar reposar el té durante 3 minutos, para que el agua se impregne bien de su sabor. Cuando retires la bolsita, ya tendrá su color verde tan característico.
Como norma general, se recomienda beber el té verde puro y sin endulzar, pero si te resulta algo amargo su sabor, a continuación te daremos algunos consejos para endulzarlo de la manera correcta.
¿Con qué debo endulzar mi té verde?
Lo mejor es usar productos naturales no refinados y que puedan contener otras propiedades adicionales además de cumplir con la función de edulcorante. Por ejemplo, son recomendables el azúcar moreno de caña o panela, preferiblemente producidos orgánicamente.
La miel también es perfecta para endulzar el té, especialmente para calmar la garganta irritada o áspera en los fríos meses de invierno y en las épocas de resfriado. Aunque es importante agregar la miel cuando el té ya no esté demasiado caliente. De lo contrario, los principios activos de la miel se deterioran y el tratamiento pierde efectividad.
Otras alternativas bajas en calorías pueden ser la stevia o los edulcorantes artificiales.
En resumen: endulza tu té con lo que más te guste. ¡Disfruta del momento!
Ideas y consejos para potenciar el aroma del té
Para obtener un sabor totalmente nuevo del té verde, existen pequeños trucos que pueden ayudarnos a hacer nuestro té verde aún más especial. Incluso una simple rodaja de limón puede proporcionar al té más antioxidantes y vitamina C. Tendrá esa irresistible acidez del limón junto con distintos beneficios para la salud y el bienestar general del cuerpo. Y si añades algunos cubitos de hielo y menta fresca al limón, podrás tener una limonada para los días cálidos de verano y la bebida ideal para una barbacoa con amigos.
Aunque, si eres valiente y te gusta experimentar, también puedes añadir zumos de frutas, como, por ejemplo, zumo de granada. También resulta irresistible con puré de frutas como el de manzana o plátano, ¡definitivamente merece la pena probar todas las versiones del té verde!
También puede ser interesante mezclar tu té verde con otro tipo de té, como la manzanilla. Podrás crear un té digestivo muy poderoso y natural.
La forma exacta en la que quieras disfrutar el té verde depende completamente de ti y tus preferencias. Lo mismo ocurre con el momento en el que decides disfrutar de una taza de esta bebida, aunque también para esto podemos ofrecerte algunos consejos.
¿Cuál es el mejor momento para tomar té verde? ¿Cuántas veces al día es recomendable?
El mejor momento para tomar una taza de té depende del efecto que quieras obtener de él.
- Para perder peso: 20 minutos después de cada comida. Así se quemarían calorías antes de que el cuerpo las absorba.
- Para desintoxicar: entre comidas. Esto evita las reacciones de las catequinas con las proteínas animales que destruyen los antioxidantes.
- Regeneración muscular: antes de las comidas. Esto aumenta la absorción de magnesio y aumenta las cantidades de vitaminas C y E.
¿Y qué pasa si bebes té verde con el estómago vacío? Bueno, ¡no pasa nada!
Muchas personas necesitan cafeína para despertar en del desayuno, pero es cierto que algunas bebidas no sientan igual de bien que otras. Si usted es una de esas personas, entonces quizás quiera probar a tomar té verde en lugar de café. Tiene el mismo efecto, pero no es tan agresiva la cafeína contenida en el té.
Aunque, por esto mismo, también recomendamos tomar té verde al menos 3 o 4 horas antes de ir a dormir, ya que puede interrumpir tu ciclo de descanso. Existen otros tipos de té sin cafeína para los momentos de relajación y calma antes de meternos en la cama, como por ejemplo, nuestro té rooibos sin cafeína.
Pero, lo dicho…¡Disfruta de una taza de té verde cuando quieras!
¿Cuánto té verde puedes beber por día?
Es cierto que beber té verde es bueno para su salud. Pero debemos encontrar la dosis perfecta para nosotros.
La dosis recomendada es de 5 tazas por día, pero debemos tener cuidado con las cantidades de cafeína que ingerimos diariamente, ya que un consumo excesivo puede resultar bastante perjudicial. Si sientes que no puedes vivir sin tu tazas de té diarias, ¡prueba alternativas sin cafeína! Hay muchísimos sabores deliciosos que podrás alternar con los tipos de té cafeinados como el té verde. No olvides que, si toma medicamentos o estás embarazada, deberías consultar con tu médico antes de tomar té con cafeína.
Sin embargo, si eres de esos que quisiera tomar más té verde pero tomarlo de la forma tradicional te resulta aburrido, te presentamos unas recetas para disfrutar del té verde de una manera completamente diferente. Así obtendrás todos sus beneficios mientras experimentas en la cocina y te atreves con nuevos sabores.
Recetas divertidas y originales con té verde
Té verde con menta fresca: la bebida perfecta para las cálidas noches de verano
Ingredientes para 4 vasos:
- Media taza de hojas de menta fresca
- 3 bolsitas de té con forma piramidal de green de Semper Tea
- 2 cucharadas de miel
- Agua hirviendo para 4 tazas
- 4 tallos de limoncillo para decorar
Preparación:
Coloca la menta, la miel y las bolsitas de té en un recipiente y añade el agua hirviendo. Déjalo reposar durante aproximadamente 5 minutos, después retira las bolsitas de té y deja que el té se enfríe. Se puede servir en un vaso con cubitos de hielo y limoncillo como decoración.
Vinagreta con té verde y miel – De inspiración francesa
Un plato francés que combina a la perfección con el aroma del té verde. Puede complementar platos como una ensalada verde crujiente, salmón al horno o gambas a la parrilla.
Ingredientes para una taza de vinagreta:
- ½ taza de agua hervida
- 1 bolsita de té verde de Semper Tea green
- Sal marina y pimienta recién molida
- 2 cucharadas de cebolla roja muy finamente picada
- 1 cucharadita de miel
- ½ cucharadita de mostaza Dijon
- 2 cucharadas de vinagre de sidra de manzana
- ½ taza de aceite de oliva virgen
- 2 cucharadas de hierbas frescas picadas, como tomillo o perejil
En lugar de cebollas rojas y vinagre de sidra de manzana como en la receta, también puedes experimentar con otros ingredientes: ¡la chalota pequeña y el vinagre de jerez son igual de buenos!
Preparación:
Vierte el agua hirviendo sobre la bolsita de té y déjalo infusionar durante 10 minutos (esta vez necesitamos que su sabor sea más intenso). Necesitaremos el té para la vinagreta.
Deposita la cebolla roja picada en un tazón grande y añade el resto de los ingredientes uno por uno: la miel, la mostaza, el vinagre de sidra de manzana y el aceite de oliva. A continuación, añade la taza de té verde y sazona con sal, pimienta y hierbas. Se debe mezclar todo bien. Deja reposar la vinagreta durante al menos 3-4 horas antes de servir para que el sabor se desarrolle de la forma adecuada. ¡Listo!
Batido de té verde y aguacate – Smoothie con doble porción de la salud
La bebida ideal para antes o durante el desayuno. Proporciona energía y acelera tu metabolismo. El té verde y el aguacate proveen de una gran cantidad de antioxidantes, proteínas y ácidos grasos saludables. De esta forma, se puede controlar el hambre y mejorar la digestión.
Ingredientes:
- 1 bolsita de té verde green de Semper Tea
- 1/2 taza de agua
- 1/2 aguacate maduro
- 1 plátano maduro
Preparación:
Hervir el agua, agregar la bolsita de té y dejar durante media hora. A continuación, retire la bolsita de té y procese bien el líquido junto con los demás ingredientes en la licuadora; ¡sírvelo recién hecho!
Próximamente podrás encontrar en nuestro blog de Semper Tea nuevas entradas que te podrán interesar. Para estar al día, no olvides seguirnos en nuestras redes sociales. Comparte también con nosotros consejos y experiencias relacionados con el té y las infusiones: Facebook, Twitter, Instagram, Pinterest, Google Plus y Linkedin.
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